ITINERARIO: Relativo al camino. Descripción de una ruta, con indicación de paradas, fechas, etc.

martes, agosto 30, 2005

SIN SENTIDO
(De Agosto 22 de 2005)
La intolerancia se apodera de nosotros sin darnos cuenta. Y entonces somos capaces de insultar, de humillar, y hasta de matar por lo que nos es contrario o diferente. Que cortos de entendimiento y que pobres de espíritu los que caen en la intolerancia, en esa radical, enceguecida, bestial. Esa percepción sesgada de una realidad que solo tiene validez en los pensamientos obtusos. Entonces ya no importan las caras, ni los corazones, ni las ideas, ni existe la posibilidad de compartir desde puntos distintos. No!!! La intolerancia anula la existencia del otro, su derecho a ser distinto, y por ende, a ser valorada su condición. Todo lo que sea distinto es condenable, parecen pensar los intolerantes, así no sepan exactamente las razones. Sencillamente se es o no se es, y todo lo contrario debe ser anulado, debe ser destruido. Entonces dejamos de ser humanos, y nos convertimos en algo tan triste, tan empobrecido, tan patético, tan despreciable, que al igual que nuestra percepción anulada del otro, nos hace ser percibidos como algo sin valor, sin esperanza!!!

Por que discriminamos? Porque rechazamos? Porque condenamos? Quien nos ha dado ese derecho?

Los muertos de nuestro país no son por la guerrilla, ni por los paramilitares, ni por el estado, ni por los maleantes. Los muertos son por nuestra intolerancia, por nuestra incapacidad de mirar al otro y darle el valor que se merece, aunque piense, o sienta, o se vista, o parezca distinto. Los muertos son por esa tendencia humana a anular la diferencia por considerarla peligrosa; los muertos son por ser tolerantes con la intolerancia.
Cuantos por eso en el día de hoy habrán caído? Cuantos más caerán mañana? A cuantos más aniquilaremos?

lunes, agosto 29, 2005

ESTACIONES QUE DUELEN...
(De Agosto 11 de 2005)
Puede existir acaso especie más infame que la humana? Que es capaz de convivir con la pobreza, el hambre, y la injusticia que padecen millones de personas alrededor del mundo y no hacer nada? Que es capaz de arruinarse la existencia por la codicia, la acumulación y la destrucción de su propio mundo sin inmutarse? Que es capaz de desconocer al otro, al próximo, y pisotearlo como si no valiera nada, para conseguir el bien propio a toda costa? Que puede vivir sin siquiera pensar en los que no tienen nada, en los parias, en los que no tendrán oportunidades?
Cuanta belleza y cuanto horror en una misma especie!!! Conviviendo juntos en el mismo espacio, pero a millones de kilómetros de distancia de sus realidades, de sus corazones!!!! Cuanta desigualdad junta, cuanto egoísmo, cuanta ternura, cuantos otros y otras que nunca se miran, cuanta humanidad reunida!!!

domingo, agosto 28, 2005

DE UNA PARADA ANTERIOR...
(De Julio 15 de 2005.)
Hablaran de nosotros las civilizaciones venideras como lo hacemos nosotros de las que nos precedieron, tratando de descifrarlas, de comprender su esencia, y a la vez construyendo verdades que solo son valederas para nosotros, es decir, para los que arribamos después de su partida. Así el sentido de evolución, de desarrollo, y de permanencia cobra significado para los observadores, mas no para los protagonistas, pues su verdadera razón, lo que a ellos verdaderamente los movía, yace ahora entre sus tumbas, o fue llevado por el viento que sopló entonces. Todo vestigio de realidad, de certeza, viaja con cada quien, se esfuma dentro del corazón y la conciencia, siendo cualquier otra opinión o punto de vista, meras especulaciones, supuestos.

Algo similar nos ocurre ahora. Tratamos de descifrar lo que vivimos, lo que interpretamos de la otra persona, lo que estará pensando y que nunca nos lo dirá en persona, lo que su corazón estará sintiendo. Y tratamos de descifrar los hechos vividos, y de darle sentido y significado desde lo que nosotros creemos. Más el verdadero significado cada quien lo sabe, desde donde lo haya vivido. Y con eso debemos quedarnos: con lo que cada uno como persona sintió, expresó, compartió, dijo. Y así no habrá espacio para dudas que quizás duelan, ni para dolores o resentimientos por cosas que no eran nuestras. Así solo daremos cuentas por nosotros mismos, y no juzgaremos al otro, ni le reprocharemos, ni le reclamaremos. No habrá campo para decepciones de otros, ni para engaños ni desengaños. Así seremos responsables solo de nuestra verdad, de nuestra parte, de lo que dimos o no, de lo que hicimos u omitimos. Cada uno, frente a sí mismo, cada uno juez y testigo de sí mismo. Y la fidelidad será propia y no de otros, y la responsabilidad dejará de ser compartida, y no podremos echar culpas, ni evadirnos, ni callar a otros. Y la libertad vendrá como el mayor de los premios, pues estaremos dando desde nosotros, franca y abiertamente, sin angustias, ni temores, y no nos importará si gustamos o si nos aprueban, eso no nos corresponde, pues solo obramos desde la verdad que cada uno alberga. Y si engañamos, será un engaño con nosotros mismos, y las traiciones serán entonces personales, y cada uno será el encargado de iluminarse o enceguecerse, o de compartir con otros su luz propia o su desdicha. Pero solo será posible si ante todo amamos, si nos amamos y desde ahí compartimos. Ya no promesas, ni compromisos, ni cargas; solo vidas, almas, corazones, momentos, sentimientos compartidos. Y lo que venga del otro será grandioso, y será siempre bien recibido. Y lo disfrutaremos mientras permanezca. Pero si llegase a faltar, o si simplemente nunca llegara, no nos sentiremos perdidos, pues nada era obligatorio. La vida se comparte libremente, y no obliga a nadie ni en la forma ni en la cantidad. Sin deudas, sin dolores, sin pesares por lo que no llega. La impermanencia como camino hacia la libertad, hacia el gozo de vivir, amar, soñar, caminar, y si podemos, y queremos, entonces proponernos en la marcha compartirlo.

Lo que digan o piensen los demás no importa. Lo importante es ser siempre sinceros con nosotros mismos. El Amor se encargará del resto.

“Nada es más difícil que reconocer la libertad del otro, sobre todo cuando el
otro es una persona que se ama y se desea.
Por eso, amar es el riesgo de
querer al otro en su libertad, esperando solo la fidelidad que el se debe a sí
mismo”

OCTAVIO PAZ

sábado, agosto 27, 2005

UN PUNTO DE PARTIDA...
(De Junio 6 de 2005)

Me gusta escribir, aunque no sé si lo hago bien, o mal. Pero pienso que de eso no se trata. Se trata de expresar, de manifestar, de dejar salir. Siempre he querido empezar a escribir algo, o llegar algún día a materializarlo en, no se, una novela, una compilación de cuentos, una antología poética, un recopilación de ensayos, una memorabilia de columnas. Algo, a través de la palabra, a la que en algún tiempo le tuve fobia, pero a la que amo, a la que siento verdaderamente dentro de mí. Quizás en estos momentos, de soltar certezas, de vivir de cara a mi soledad, de querer partir aún a pesar del dolor de dejar lazos muy fuertes, y ángeles que dan vida a mi corazón, y amores eternos e incondicionales, es la palabra la que se puede convertir en mi mejor amiga, en mi aliada para sobrellevar todo esto; la que me acompañe, a la que le cuente y me escuche, la que me diga cosas a medida que las escribo, o las pienso para luego escribirlas. Es la palabra, la que esta dentro, o a la que debo estar atento para escuchar de afuera, o la que llegue en fragmentos, por temporadas, o partida en pequeñas letras, la que quiero de ahora en adelante cultivar, para poder, en algún momento, armar, descifrar, entender y dar a conocer, a mí mismo, o a quienes estén cerca.

viernes, agosto 26, 2005

Arranco este espacio con ya algunos kilómetros de recorrido. Casi 4 meses de nuevas rutas, de finales e inicios de otros viajes. De busquedas, de soledades, de encuentros, de silencios, de tristezas, de alegrías al 100. La constante es ahora la búsqueda, el movimiento, el viaje. Hacia donde? Eso no es lo importante. Lo importante ahora es cómo quiero viajar, de que manera recorrer el camino, sea cual sea.
Y ahora, abro esta ventana para compartir más facilmente del viaje, con quienes me cruzo, con quienes me acompañan, con los que estan de paso, o con los que estarán cuando arrive finalmente. Con los que comparto la vida, con esos y esas, es con y por quienes desde hoy comparto abiertamente este, mi itinerario de viaje.